Los/as trabajadores/as del CPF preferimos denominarnos como “Educadores y Educadoras”,puesto que todos/as aportamos al proceso educativo de los/as estudiantes, desde distintas áreas y
perspectivas, ya sea desde el ámbito académico como también del psicosocial y emocional. Es así como entendemos la práctica docente como un proceso de construcción de conocimiento
mutuo, donde participamos tanto los/as educadores/as como los/as estudiantes.
De esta forma, participamos de la liberación del conocimiento, más allá de la mera instrucción o el manejo dictatorial de la información. Como educadores/as, somos acompañantes de los procesos de
aprendizaje de los/as estudiantes, apoyos y facilitadores/as de la información que éstos requieran para el desarrollo de sus conocimientos.
Es por todo lo anterior que definimos las diversas asignaturas que se imparten en el colegio desde una perspectiva crítica y transformadora, presentando temáticas contingentes y de interés social; proponiendo actividades que permitan la creatividad y la expresión crítica de los/as estudiantes; aludiendo al contexto de cada una de las personas que lo reconozcan como válido para desarrollar aprendizajes significativos, desde las perspectivas de la educación popular y la pedagogía crítica.
Nos consideramos educadores/as populares, con perspectiva crítica y una práctica cohesionada con la transformación de las estructuras educacionales y sociales hegemónicas.